jueves, 26 de abril de 2012


Entre la sombra y el fuego


Entre la sombra y el fuego
yo venero la casa cóncava de tus genitales,
los campos dorados bajo tus pies,
las leves orillas de tu delirio.

Yo venero la arboleda
 que crece oblicua en tus axilas
y la geografía de tu cuerpo
que prefigura la de tu país
según los mapas antiguos de los viajeros.

Nada hay más tenue que tu luz de libélula
arrancada del fondo de los planetas
y que ese incesante flujo de raíces
que se pierde lento entre las aguas.

Yo venero la noche
que crece y se agota en tu vientre,
la luna de estaño que cuelga sobre tu ventana
y a todos los astros que giran unísonos
alrededor de tu sueño.

Juan Carlos Lázaro
(Desde Lima, Perú)